Nombre: Izumi Curtis
Edad: (Desconocida)
Genero: Femenino.
Descripción Física: Delgada, fuerte, cabello negro que parece estar formado por rastas y usualmente lo lleva amarrado. Viste un vestido sin mangas blanco que le hace ver su buena figura y en ocasiones se pone un sweter purpura. Con unos paltalones que llegan a la rodilla negros. Usa su anillo matrimonial en la mano izquierda
Descripción Psicologica: Mujer temperamental de buen corazón. Detesta a la milicia y su objetivo es ponder enseñar a los jovenes buenos hábitos sin que se pierdan en los vicios del mundo.
Historia: Izumi Curtis es una alquimista que de joven, se dice que entrenó en las montañas de Briggs y se hizó conocida en esa zona como una misteriosa mujer que derrotó animales y oficiales de la zona.
Sin embargo, dejó la casa donde esta vivía porque vio que si permanecía allí no podría usar la alquimia aprendida para ayudar a los demás. No rompió, en cualquier caso, el contacto con su maestra.
Se casó con Sigu Curtis, que regenta una carnicería en Dublith. Debido a complicaciones, se vio obligada a abortar al hijo que iban a tener. Sigu no la culpó por ello, pues era la vida del niño, o la de ella; sin embargo, Izumi decidió ir en contra de las prohibiciones, e intentó resucitar al niño mediante alquimia humana. Naturalmente no lo consiguió. Además, el peaje que pagó a la Puerta de la Verdad fueron algunos de sus órganos internos, dejándola imposibilitada para tener hijos, y haciéndole vomitar sangre a menudo, en especial durante la lucha. El tema de lo que hizo se volvió tabú en su casa. A raíz de esto puede usar alquimia sin dibujar un círculo, como todo el que ha visto el interior de la Puerta de la Verdad. Desde esto, toma unas medicinas.
Durante un viaje con su marido, ayudó a la gente de Rizenbul a reparar un dique frente a un río que podía desbordarse, y los hermanos Elric le pidieron que los tomara de discípulos. Ella quiso negarse, pero al ver las caras suplicantes y decididas de ellos, los aceptó. Realizó un entrenamiento de un año con ellos, siguiendo una filosofía muy particular: no sólo les enseñó a hacer alquimia, sino también, a luchar y a valerse por sí mismos sin necesidad de ella.
Un día un sujeto llegó a su casa pidiendole que fuera maestra de alquimia en su academia, ella no aceptó pero despues se dio cuenta que debía de cambiar al mundo enseñando por este medio y decidió cambiar de recidencia con su marido Sigu para cumplic con su objetivo.
Base de alquima: Domina todas la areas perfectamente.
Gustos y Disgustos: Le encanta el chocolate. Odia la milicia.